El impacto del coronavirus (COVID-19) en la economía no tiene precedentes y se siente en todo el mundo. El mundo empresarial se ve profundamente afectado por esta pandemia que, además de ser una amenaza para la salud pública, tiene efectos negativos a nivel económico y social que ponen en peligro cualquier inversión a corto, mediano y largo plazo. La pandemia está afectando severamente los mercados laborales, las economías y a las empresas, incluidas las cadenas de suministro mundiales, causando una interrupción generalizada del comercio.
En Honduras, será vital que la clase empresarial continúe realizando el esfuerzo de confiar sus inversiones en el país y en el desarrollo progresivo de su economía, sin embargo, para que esto sea posible, es necesario que el Estado de Honduras, principalmente por medio del Poder Ejecutivo y Legislativo, genere regulaciones que constituyan un verdadero alivio a las finanzas de la empresa privada.
En este contexto, el Poder Legislativo ha aprobado ciertas iniciativas de ley remitidas por el Poder Ejecutivo para contrarrestar los efectos del COVID-19 en la economía nacional, como ser los Decretos Legislativos 33-2020, 43-2020, 83-2020, 85-2020, entre otras normativas, dentro de las cuales se han autorizado ciertas medidas como alivio a corto plazo para la empresa privada, a continuación detallamos algunas de ellas:
- Descuento de hasta un 20% en el pago del impuesto sobre bienes inmuebles.
- No sujeción al impuesto sobre ventas (ISV), derechos arancelarios y demás impuestos a la importación, en la compra local e importación de insumos, equipo médico, así como las materias primas, maquinaria, insumos, equipos, repuestos, accesorios y material de empaque necesarios para la manufactura de insumos médicos, los antisépticos y desinfectantes que sirven para minimizar el riesgo de infección por COVID-19.
- Suspensión de cotizaciones al régimen de aportaciones privadas (RAP).
- Extensión de plazos de obligaciones tributarias, como ser las obligaciones formales respecto de precios de transferencia, del impuesto sobre la renta (ISR) e impuesto sobre ventas (ISV) de empresas sin operaciones durante el estado de emergencia.
- Modificación del cálculo de los pagos a cuenta del impuesto sobre la renta (ISR).
- Aportación solidaria para empleados sujetos a suspensión de contratos laborales por causa de fuerza mayor derivada de la emergencia sanitaria nacional.
- Implementación de la firma electrónica.
- No exigibilidad de permiso de operación local para empresas que estén operando con entrega a domicilio o por ventas en línea y gestión del registro tributario nacional (RTN) vía correo electrónico.
- Permitir el uso de documentos fiscales vencidos durante todo el periodo fiscal 2020.
- Autorizar la facturación de empresas con procesos de bloqueo de su registro tributario nacional (RTN).
De momento, el sector empresarial y la clase trabajadora exigen que todavía está pendiente la implementación de medidas de alivio con un mayor impacto financiero a mediano y largo plazo, sin duda el camino por recorrer para recuperar la economía será largo y complicado, pero anhelamos que los Gobiernos entiendan los retos que plantea esta crisis sanitara, económica y social, a efectos de crear nuevas soluciones que permitan el desarrollo de la empresa privada como la válvula de escape a esta crisis.
